Las propuestas y
sugerencias de UNITS PEL CABANYAL son irreprochables en todos los sentidos
además de estar cargadas de razón, sin embargo, tengo la impresión de que, dado
que "las ostras no se abren con persuasión", quizá más efectivo - por
molesto para la ostra - optar por iniciativas más radicales a la vez que legales, como es el solicitar,
a quien corresponda, para el Cabanyal-Canyamelar el status de entidad local
menor.
Como ello no provocará más
que una conmiserativa sonrisa en "quien corresponda", después se
puede ir más allá y solicitar directamente la segregación de dichos barrios de la ciudad
de Valencia, incorporados a la brava en 1897. Hay 60 años de autonomía
municipal de Poble Nou de la Mar y eso tiene su peso.
Unos y otros podemos pensar que
la consecución de la segregación e independencia es algo quimérico, imposible,
bien, pues “seamos realistas, pidamos lo imposible”.
Hay ejemplos de casos más o
menos similares: el barrio de Igeldo con respecto a San Sebastián
(http://www.diariovasco.com/20080416/local/san-sebastian/diputacion-retomara-expediente-segregacion-200804161240.html)
y, el más surrealista (y ¿por qué no...?) de Sarrià en Barcelona (http://www.20minutos.es/noticia/1616184/0/barcelona/sarria/independencia/).
Tenemos un caso más cercano que,
tanto las "ostras" como los persuasores, conocen bien: Benimàmet
(http://www.levante-emv.com/valencia/2012/11/14/benimamet-suena-independencia/951995.html)
Desgraciadamente, solo lo raro o
truculento recibe algo de atención de los medios. Claro que a las palabras hay
que añadir hechos legales y pacíficos.
¡Salud y suerte!
José Aledón
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